Ir al contenido

Ir al índice

Los jóvenes preguntan

¿Es malo ser popular?

¿Es malo ser popular?

Completa la siguiente oración:

․․․․․ es bueno ser popular.

  1. A. Siempre

  2. B. A veces

  3. C. Nunca

SI ELEGISTE la opción B, has contestado correctamente, pues quien goza de popularidad es admirado por muchas personas, y eso a veces es bueno. La Biblia predijo que los cristianos serían la “luz de las naciones” y que muchos se sentirían atraídos a ellos (Isaías 42:6; Hechos 13:47). De modo que, en este sentido, puede decirse que los cristianos son populares.

¿Sabías esto?

Jesús también fue popular. De jovencito se ganó el favor de Dios y de los hombres (Lucas 2:52). Además, la Biblia dice que cuando se hizo adulto, “grandes muchedumbres le siguieron de Galilea y de Decápolis y de Jerusalén y de Judea y del otro lado del Jordán” (Mateo 4:25).

¿Estuvo mal?

No, porque Jesús no buscaba esa fama. Tampoco se moría por que los demás lo aceptaran. Él simplemente hacía lo que era correcto, y eso llamaba la atención de las personas (Juan 8:29, 30). No obstante, Jesús sabía que la gente suele cambiar de opinión y que la aceptación de la que disfrutaba era temporal. De hecho, hasta sabía que terminarían asesinándolo (Lucas 9:22).

Conclusión:

La popularidad es como el dinero. Tener dinero no es necesariamente malo. La cuestión es lo que uno está dispuesto a hacer para obtenerlo o para no perderlo. Lo mismo sucede con la popularidad.

¡Cuidado!

Muchos jóvenes están dispuestos a hacer lo que sea con tal de ser populares. Algunos intentan complacer a todo el mundo y se dejan llevar por los demás. Y hay quienes obligan a sus compañeros a aceptarlos por medio de abusos y amenazas. *

En las siguientes páginas examinaremos dos caminos que, equivocadamente, muchos siguen para ser populares. Pero también veremos una mejor alternativa.

 

^ párr. 12 La Biblia dice que “los nefilim” —unos abusones de la antigüedad⁠— eran “hombres de fama” (Génesis 6:4). A ellos solo les interesaba fomentar su propia gloria.