Cada año, millones de personas mueren directa o indirectamente por culpa de las drogas o de sustancias parecidas. Y durante la pandemia del COVID-19 ese problema se ha hecho mucho más grave. Muchas personas han logrado vencer la adicción a las drogas gracias a los sabios consejos de la Biblia. ¿Está usted luchando con este problema? Pues entonces estos consejos también pueden ayudarlo. a

En este artículo veremos lo siguiente:

•  ¿Por qué debería buscar ayuda en la Biblia para vencer una adicción?

•  Cuatro consejos que da la Biblia para vencer una adicción

•  Versículos de la Biblia que pueden ayudarlo a vencer una adicción

•  Más casos de la vida real: La Biblia los ayudó a superar las adicciones

•  ¿Prohíbe la Biblia los tratamientos médicos contra las adicciones?

•  ¿Prohíbe la Biblia el uso medicinal de las drogas?

 Los investigadores han descubierto que las adicciones suelen estar relacionadas con problemas muy arraigados como la soledad, el estrés, la ansiedad y la depresión. La Biblia puede darle la fe que necesita para vencer todos esos problemas que hay detrás de las adicciones y le enseñará cómo puede ser amigo de Dios (Salmo 25:14). La Biblia le puede ayudar a superar cualquier cosa aunque a usted le parezca imposible (Marcos 11:22-24).

1.  1. Conozca a Jehová b (Juan 17:3). Él es el Creador y tiene un poder infinito. Pero es más que eso: es su cariñoso Padre celestial. Él quiere ser su amigo, y quiere usar su poder para ayudarlo (Isaías 40:29-31; Santiago 4:8). Y, si usted decide aceptar su amor, él le promete un futuro increíble (Jeremías 29:11; Juan 3:16).

2.  2. Pídale ayuda a Jehová. Órele a Dios y pídale que lo ayude a superar su adicción para que sea “santo [o limpio] y […] agrade a Dios” (Romanos 12:1). Él le dará su espíritu santo o fuerza activa para que usted tenga “el poder que va más allá de lo normal” (2 Corintios 4:7; Lucas 11:13). Esa fuerza le ayudará a dejar las drogas y a tener poco a poco una “nueva personalidad” que le agrade a Dios (Colosenses 3:9, 10).

3.  3. Llene su mente con los pensamientos de Dios (Isaías 55:9). Dios le ayudará a “seguir renovando su forma de pensar”, a cambiar sus patrones de pensamiento; eso contribuirá a que pueda romper con las adicciones (Efesios 4:23). Los pensamientos de Dios están en la Biblia, por eso es tan importante que la lea todos los días (Salmo 1:1-3). A muchos les ha servido que alguien los ayude a entender lo que enseña la Biblia (Hechos 8:30, 31). Los testigos de Jehová ofrecemos un curso interactivo de la Biblia. También lo invitamos a asistir a nuestras reuniones, donde estudiamos la Biblia y aprendemos cómo usar en nuestra vida lo que dice.

4.  4. Júntese con personas que lo ayuden. Si está luchando contra una adicción, recuerde que sus amigos influyen muchísimo en usted para bien o para mal (Proverbios 13:20). Cuando nos acercamos a personas que adoran a Dios, podemos encontrar buenos amigos. Y Dios quiere que tengamos esos amigos, porque sabe que nos hacen bien (Salmo 119:63; Romanos 1:12). Además, escoja con cuidado las cosas con las que se entretiene, porque a fin de cuentas lo que ve, escucha y lee está lleno de personajes con los que usted pasa el tiempo. En pocas palabras: evite cualquier cosa que lo aleje de su objetivo (Salmo 101:3; Amós 5:14).

 Filipenses 4:13: “Tengo fuerzas para todo gracias a aquel que me da poder”.

 “Sabía que yo no iba a poder sola, que no era tan fuerte como para dejar las drogas. Por eso, le pedí a Dios que me ayudara. Él me dio las fuerzas que necesitaba” (Patrizia, de Italia).

 Joseph Ehrenbogen creció rodeado de violencia y se hizo adicto al alcohol, al tabaco, a la marihuana y la heroína. Estuvo a punto de morir de sobredosis varias veces, pero algo que leyó en la Biblia lo convenció de que podía cambiar. Lea su historia en el artículo “Aprendí a respetar a las mujeres y a respetar mi vida”.

 Dimitri Kórshunov intentó muchas veces dejar el alcohol. Vea el video “Llegué a odiar la vida que llevaba” para descubrir qué lo ayudó a superar su adicción.

 No. La Biblia dice que “los que están sanos no necesitan un médico, pero los enfermos sí” (Mateo 9:12). El Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de Estados Unidos también dice: “La drogadicción es una enfermedad compleja, y dejar de usar las drogas usualmente requiere más que buenas intenciones o una gran voluntad”. Claro, la fuerza que Dios da es mucho más poderosa que la fuerza de voluntad de cualquier persona. Aun así, muchos de los que han superado las adicciones gracias a los consejos de la Biblia también han necesitado algún tipo de tratamiento médico. c Por ejemplo, Allen, un hombre que pasó por esta situación, recuerda: “Cuando estaba tratando de dejar el alcohol, la abstinencia me provocaba un dolor físico insoportable. En ese momento me di cuenta de que, además del apoyo espiritual que estaba recibiendo, también necesitaba un tratamiento médico”.

 No. De hecho, la Biblia habla de usar el alcohol para tratar enfermedades o para ayudar a una persona que está a punto de morir a soportar el dolor (Proverbios 31:6; 1 Timoteo 5:23). Pero hay que tener en cuenta que, al igual que el alcohol, los medicamentos que se usan para calmar el dolor pueden ser muy adictivos. Por eso, es importante estar informados de los posibles riesgos y tener cuidado cuando se usen medicamentos con receta médica para el dolor (Proverbios 22:3).